Un gato tiene una convulsión cuando las neuronas en su cerebro funcionan independientemente, o fallar. Cuando esto sucede, el gato puede perder el conocimiento o si no ser desorientado, acompañado de movimientos del cuerpo rápida y descontrolada.
Causa
Las dos causas más comunes de convulsiones felinas son trauma epilepsia y el cerebro, como de una lesión, infección o reacción a una droga o toxina. Otras condiciones de salud pueden ser responsables, tales como falta de diabetes o del riñón o del hígado.
Tipos
Las convulsiones vienen en diferentes intensidades y se clasifican en tres tipos---petit mal, gran mal y estado epiléptico.
Síntomas
Las ausencias se caracterizan por una mirada en blanco o el temblor de un miembro, y son generalmente muy suave y corto vivido. Asimientos del mal magnífico generalmente duran cinco minutos o menos, implican una parálisis completa del cuerpo o espasmo y son los más comunes. Estado epliepticus las convulsiones son las más severas, con síntomas similares a los del gran mal, pero dura mucho más tiempo o con convulsiones que ocurren uno tras otro.
Riesgos
Petit mal y gran convulsiones generalmente no plantean riesgos graves para la salud. Pero los asimientos de estatus epiléptico pueden causar graves lesiones internas si no se controla. Toma prolongada puede conducir a aumento de las temperaturas interno, causando daño a los órganos o incluso la muerte.
Tratamiento
El asimiento ocasional no es generalmente problemático, a menos que las más graves convulsiones de epiléptico estado desarrollan. En casos severos, se prescriben medicamentos anticonvulsivos, que producen una reacción sedante en los nervios afectados en el cerebro para reducir la frecuencia y severidad de los ataques.